Vengo de una raza
de ajajayes enchidos
a la menor provocación,
vengo de un corrido
donde hasta la muerte sabe,
vengo de ese maizal
que alimenta a los concebidos
en la estrechez de un escarabajo,
crecí entre un lago de sal
y la fecundidad de un valle
donde se canta con tequila
la lírica trágica
de quien no teme a nada.
Llevo en la muerte ese gusto
que sólo Dios del cielo me lo quita.
No obstante todo eso,
por mis oídos entra un rap
y de mis labios sale un blues,
mi hija baila Soul
y escucha rocanrol…
por alejarme del árbol
ella deberá hallar
su propia raíz.
de ajajayes enchidos
a la menor provocación,
vengo de un corrido
donde hasta la muerte sabe,
vengo de ese maizal
que alimenta a los concebidos
en la estrechez de un escarabajo,
crecí entre un lago de sal
y la fecundidad de un valle
donde se canta con tequila
la lírica trágica
de quien no teme a nada.
Llevo en la muerte ese gusto
que sólo Dios del cielo me lo quita.
No obstante todo eso,
por mis oídos entra un rap
y de mis labios sale un blues,
mi hija baila Soul
y escucha rocanrol…
por alejarme del árbol
ella deberá hallar
su propia raíz.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Jorge te escucha, habla con él